Cuando comenzamos con la editorial, nunca pensamos que llegaríamos a donde hoy estamos, por eso tampoco nos sentamos a establecer una marca que nos defina. A medida que pasaba el tiempo nos fuimos dando cuenta que nuestro antiguo nombre no nos representaba. Además que se quedaba corto en expresar lo que en realidad somos.
Por eso en nuestro cuarto año de vida decidimos cambiar nuestro nombre. Creamos una nueva marca alineada con nuestros valores, que represente la transparencia y la sinceridad de nuestra editorial, como así también la intrepidez y valentía de nuestros escritores.
Hoy estamos presentando: Robalir.
Robalir es nuestra nueva identidad que tiene como objetivo dejar plasmada nuestra personalidad, creando una marca única, perdurable y fácil de recordar. Queremos que Robalir sea un faro de referencia para todos los escritores que deciden apostar por su trabajo, superándose en cada nuevo libro y que confían en la ayuda que podemos brindarles.
Robalir deriva del nombre de un antiguo erilaz, un maestro tallador de runas de la época vikinga, llamado Raud-Ballir y cuyo significado es “El intrépido rojo”. Existen más de veinte piedras rúnicas talladas y firmadas por este vikingo y otras tantas a las que se le atribuye su autoría. Su forma de escritura era la poesía en nórdico antiguo, y sus grabados aún perduran y resisten el paso del tiempo.
Con este nuevo nombre queremos trazar un camino, más fuerte y profundo, generando un nuevo tipo de editorial. Una editorial en la que el editor y el escritor trabajen mano a mano para lograr trascender barreras y abrir puertas a las nuevas formas de publicación.